jueves, 29 de diciembre de 2016

El fluir se congeló



Como si de la nada, este fluir de sentimientos se colapsó y se quedó tan helado como los glaciares, más fríos que mi nariz en invierno y tan congelados como mi corazón.

Se ha marchitado y ahora, lo que una vez fue simplemente compañía, calor y amor se esta convirtiendo en un insensible e hiriente corazón que daña a todos... Ni unas palabras, ni meses, están curando este dolor que me atormenta día tras día.



Ni lágrimas suelta en los peores momentos y por mucho dolor que tienta, lo máximo una lágrima de rabia se derrama. La cual no encuentra forma de ser recordada.
El antiguo nacimiento de mis sentimientos ha cesado, se ha secado y no hay forma de hacerlo renacer... tantos años, tanto dolor, tantas veces brotó que ya no hay forma de que resurja y como un anhelo se queda en la memoria. Y lo único que provoca a su portado es dolor, intenso tanto que querría desaparecer; y evitar todo el dolor que siente pero no puede expresar... duele y no sabéis cuanto...


Mi desesperación se alimenta poco a poco y mis ansias por aislarme aumentan, para evitarlo todo... Mis sentimientos, mis lágrimas, mis problemas ya no existen; solo un intenso dolor que me atormenta cada día.